EL FIN DE UNA ERA

β€œπ‘€π‘’ π‘’π‘›π‘ π‘’π‘›Μƒπ‘Žπ‘Ÿπ‘œπ‘› π‘Ž π‘’π‘›π‘‘π‘Ÿπ‘’π‘”π‘Žπ‘Ÿπ‘šπ‘’ π‘ π‘–π‘’π‘šπ‘π‘Ÿπ‘’ π‘π‘œπ‘Ÿ π‘šπ‘– π‘π‘Žπ‘–Μπ‘ β€

Si de Γ­dolos charrΓΊas se refiere, el prΓ³ximo viernes se retira de la SelecciΓ³n Uruguaya el mayor de ellos. Luis SuΓ‘rez jugarΓ‘ ante Paraguay su ΓΊltimo partido vestido de 𝐢𝑒𝑙𝑒𝑠𝑑𝑒, a sus 37 aΓ±os.

Un emblema del π΅π‘œπ‘™π‘ π‘œ que traspasΓ³ camisetas y se transformΓ³ en el mayor exponente del fΓΊtbol uruguayo en el mundo. Toda historia tiene un punto de partida, y el de πΏπ‘’π‘β„Žπ‘œ fue en Nacional, donde hizo su debut ni mΓ‘s ni menos que en un duelo de Copa Libertadores, allΓ‘ por el 2005. JugΓ³ 65 partidos con la π‘‡π‘Ÿπ‘–π‘π‘œπ‘™π‘œπ‘Ÿ -repartidos en dos perΓ­odos- y convirtiΓ³ 25 goles. AdemΓ‘s, conquistΓ³ cinco tΓ­tulos nacionales.

DebutΓ³ en Uruguay el 7 de febrero de 2007, en un amistoso ante Colombia. Lo hizo con la diez en su espalda: β€œπ’€π’ π’‡π’–π’Š 𝒖𝒏 π’π’Šπ’Μƒπ’ 𝒒𝒖𝒆 𝒔𝒐𝒏̃𝒂𝒃𝒂 𝒄𝒐𝒏 π’‹π’–π’ˆπ’‚π’“ 𝒆𝒏 𝒍𝒂 π‘Ίπ’†π’π’†π’„π’„π’Šπ’Μπ’ 𝒄𝒐𝒏 𝒍𝒂 β€˜πŸπŸŽβ€™ 𝒅𝒆 π‘­π’“π’‚π’π’„π’†π’”π’„π’π’π’Šβ€, confesΓ³ mientras anunciaba su despedida. ParadΓ³jicamente, fue expulsado en aquel dΓ­a de su estreno. Han pasado 17 aΓ±os desde el inicio hasta el punto final. En el medio, el π‘ƒπ‘–π‘ π‘‘π‘œπ‘™π‘’π‘Ÿπ‘œ se convirtiΓ³ en el mΓ‘ximo goleador histΓ³rico (69), en el mΓ‘ximo asistente (39), en el segundo jugador con mΓ‘s partidos (142) y en el segundo goleador histΓ³rico de las Eliminatorias Sudamericanas (29). AdemΓ‘s, es uno de los dos ΓΊnicos futbolistas uruguayos en convertir en tres ediciones mundialistas (SudΓ‘frica 2010, Brasil 2014 y Rusia 2018).

Por supuesto, se coronΓ³ campeΓ³n de la Copa AmΓ©rica en 2011, siendo el MVP del torneo y su segundo mΓ‘ximo goleador. Probablemente aquella final haya sido el partido mΓ‘s importante en la carrera de SuΓ‘rez, o uno de los mΓ‘s importantes para no ser dictaminante, y curiosamente tambiΓ©n fue ante Paraguay, mismo rival con el que le pondrΓ‘ el broche de oro a esta historia. Uno de esos privilegiados que estΓ‘n tocados por la varita.

El Centenario estarΓ‘ repleto, en lo que va a ser una jornada a pura emociΓ³n. A la altura de lo que amerita la despedida del mΓ‘ximo Γ­dolo. Una leyenda del fΓΊtbol sudamericano. Que sea una fiesta, π‘ƒπ‘–π‘ π‘‘π‘œπ‘™π‘’π‘Ÿπ‘œ.

Lucas Huerga

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